Recuerdo cuando hablé con el profesor Ernesto Derbez, ex secretario de economía, sobre la importancia de las habilidades en la toma de decisiones. Él me dijo: "Más que conocimientos, necesitas habilidades de negociación, innovación y adaptabilidad". Esa conversación me enseñó que la teoría es importante pero la práctica es fundamental para ser un experto.
Actualmente, los desafíos que tiene la industria son únicos y requieren de soluciones innovadoras y sostenibles para mantener la competitividad y cumplir con las expectativas de los clientes.
La complejidad de la cadena de suministro se ha incrementado debido a la globalización, la evolución tecnológica, el nearshoring, la presión por la sostenibilidad, desastres naturales, conflictos políticos y pandemia. Como experto en la materia, he visto cómo la disrupción en la cadena de suministro, necesitan de profesionales tolerantes, resilientes, innovadores, adaptables y con un alto nivel de cuestionamiento. Por lo que yo creo que la logística y la educación son dos temas vitales para el desarrollo y la competitividad de cualquier país o empresa.
Mi carrera se ha desarrollado principalmente en el manejo de la planeación de cadena de suministro y en la operación de gestionar todos los eslabones de Coca Cola FEMSA. Desde hace 6 años estoy como gerente en transporte primario en gestión de recursos pero llevo más de 27 años en el sector logístico y he visto cómo la industria ha evolucionado y se ha enfrentado a nuevos retos.
La logística global es una industria vital para la economía, y para México no es la excepción.
En México, la logística es especialmente importante debido a su posición geográfica. Según datos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de México, la logística representa el 10% del PIB nacional y emplea a más de 6 millones de personas en el país.
México ha experimentado un crecimiento significativo en su industria logística y comercio exterior desde la implementación del TLCAN hace 26 años. Sin embargo, el país enfrenta desafíos en términos de regulación y estandarización del sector de transporte, así como en la adopción de energías renovables, infraestructura insuficiente, inseguridad y burocracia. Hoy no podemos perder la oportunidad de generar ventajas en méxico con la atracción de industrias. Y mientras tanto, las tensiones geopolíticas y la tendencia hacia la regionalización están cambiando el panorama del comercio internacional.
En Coca-Cola FEMSA, tenemos la función de mejorar los diferentes eslabones de la cadena de suministro para optimizar procesos con el objetivo central de la satisfacción al cliente que al día de hoy es muy demandante.. Por lo tanto, las empresas necesitan adaptarse rápidamente para satisfacer las necesidades cambiantes del cliente tomando en cuenta el contexto local e internacional.
Para mi, la logística es la columna vertebral de las organizaciones y debe optimizar procesos y recursos para soportar los objetivos comerciales, desde la compra de insumos hasta la entrega del producto final.
Anteriormente la logística solía ser rígida y tenía muchos desperdicios a lo largo de la cadena debido a la falta de integración. Actualmente, los habilitadores tecnológicos han permitido una aceleración más eficiente, entonces ¿Cuáles son los desafíos actuales?
En primer lugar, la disrupción y cambios en la cadena de suministro: La tecnología ha sido un facilitador importante para superar este reto, pero también puede crear desafíos si no se utiliza de manera estratégica.
Como mencioné anteriormente, los hábitos y el contexto actual han obligado a una planificación más eficiente y rápida.
Conforme el mercado progresa, es necesario que la cadena de suministro se ajuste y se convierta en una entidad más flexible y adaptable. Con los avances de la inteligencia artificial los pronósticos de la demanda y prevención del comportamiento del cliente han mejorado. Sin embargo, para lograr una logística efectiva, es importante entender el presente, predecir el futuro y siempre comprender el contexto del cliente para tratar de maximizar el valor y eficiencia de la cadena con costos y cuidados óptimos.
En FEMSA hemos implementado tecnologías como el monitoreo en tiempo real de los envíos, el análisis de datos para mejorar la toma de decisiones y la integración de sistemas. Asimismo, hemos trabajado en la generación de planes de continuidad de negocio para garantizar la resiliencia frente a situaciones difíciles y en la promoción de una cultura de seguridad para reducir los riesgos operativos.
Como segundo reto, la sostenibilidad: Sabemos que es necesario adoptar prácticas de transporte más ecológicas y reducir la dependencia de los combustibles fósiles. En otros países, se están llevando a cabo iniciativas para adoptar energías renovables, pero en México todavía hay mucho por hacer.
Actualmente se sostiene una presión social para que las empresas mantengan este objetivo que hoy en día puede implicar ser cancelable o generar prestigio en una marca. Es importante conocer el contexto de cada mercado, su infraestructura y sus limitantes para realmente asegurar una cadena sostenible y transparente con los clientes. En mi opinión, no toda empresa está desarrollando transparencia en la sostenibilidad de los productos y debería ser obligación tanto para las industrias como consumidores obtener información antes de emitir un juicio en el valor de la marca, la producción y el verdadero beneficio social, esto es comúnmente conocido como greenwashing. Por ejemplo, el caso de los autos eléctricos que aunque generan movilidad con energía limpia, su pila se degrada en miles de años. O el caso de marcas como Nike, que tras ser acusados por explotación, la marca adquirió mayor prestigio por la producción sustentable en algunos de sus productos.
La sostenibilidad en empresas e industrias tienen que encontrar un equilibrio entre la transparencia, prestigio de la marca y la colaboración para trabajar con estas limitantes. Las empresas deben definir objetivos claros y medir sus recursos y tiempos para poder ser sostenibles y adaptarse a las corrientes que exigen mayor valor en sus productos.
Por último la educación: Como reto y solución integral para la creación de un pensamiento estratégico y habilidades innovadoras en la logística.
Mi papá decía: “la información es poder” y yo le agregaría “cuando sepas utilizarla”. Aquí la importancia de tener habilidades estratégicas. En FEMSA, adicional a la información, tenemos experiencia, y la experiencia se gana tomando decisiones buenas y malas y poniéndolo en el campo de las organizaciones eso también conocimiento.
Como se mencionó, la inteligencia artificial es un habilitador importante para lograr una mayor eficiencia en la cadena de suministro, pero también requiere de personas que sepan cómo utilizarla y aprovecharla de manera efectiva. Los expertos en logística deben estar preparados para pensar de manera disruptiva y estar abiertos a nuevas ideas y tecnologías para superar los retos actuales.
Por tanto, la educación es una de las claves para la mejora de la logística. Las universidades junto con gobierno y empresas, deben ofrecer programas de estudio, fomentar la investigación y la innovación en el diseño de sistemas y procesos que mejoren la eficiencia y la productividad.
La logística no es una tarea estática, siempre hay espacio para mejorar y optimizar los procesos de la cadena de suministro. No importa qué tan buena es tu cadena, puede mejorar.
Es importante recordar que los retos logísticos en México están interconectados y abordar todos estos desafíos de manera conjunta podría brindar una oportunidad para lograr un cambio significativo en el ámbito logístico mexicano.
En resumen, una solución integral, es entender que en estos retos residen las oportunidades para desarrollar valor económico, comercial y social. Trabajar desde la educación con herramientas actualizadas tecnológicas para satisfacer preocupaciones sociales.
Debemos enfocarnos en el futuro y no en el pasado, adoptando una perspectiva pragmática en lugar de ideológica.
Estamos en la economía del conocimiento, es crucial impulsar la educación
La adaptabilidad a las nuevas realidades y la innovación constante son habilidades fundamentales para enfrentar los retos de la logística. Estamos en una marcha de futuros profesionistas, el uso de herramientas de IA, es pensar en cómo crear estrategias y un ejercicio de continuo aprendizaje enfocado no solo al cliente, sino a un contexto geopolítico, con prospectiva de los próximos retos y adaptación a los cambios.